miércoles, 14 de septiembre de 2011

14:20 PM

Levantarse con la salida del sol. Una ducha refrescante. 2 horas de clase. Y una caminata hasta la estación. Esperar con ansias a que llegue el primer tren, pero con a un más ganas a la persona que va en el.

Hacer la comida. Espaguetis a la boloñesa, alimento de estudiantes. Una pequeña charla en un zulo decorado... ¡A investigar se ha dicho! Calles empedradas, plazas con fuentes, casas con gatos negros, estatuas de bronce. Parada obligada, batidos de sabores. Paseo por lugares prohibitivos, tiendas, Güendolina.


Ya es hora, el tren está a punto de irse. Suelta toda la calderilla y corre hacia el andén.

No hay comentarios:

Publicar un comentario